Investigadores del laboratorio BioMEMS de Entre Ríos, diseñaron un sofisticado dispositivo para combatir la segunda causa de ceguera en el mundo.
La Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, dependiente del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, otorgó $330.000 a un grupo de investigación perteneciente a la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Entre Ríos (FI-UNER) para el desarrollo de microdispositivos activos para el tratamiento de glaucoma.
El proyecto, dirigido por el Dr. Fabio Guarnieri, fue llevado adelante por un equipo multidisciplinario del Laboratorio BioMEMS de la FI-UNER, a través del financiamiento adjudicado por el Fondo para la Investigación Científica y Tecnológica (FONCYT) de la Agencia.
El ojo fabrica en forma constante un líquido llamado humor acuoso que circula en su interior y sale a través de una serie de canales altamente especializados. En condiciones normales existe un balance entre la producción y la salida del humor acuoso, de forma tal de mantener la forma y la función del ojo. Cuando el humor acuoso no puede salir, la presión intraocular aumenta, lo que puede llevar al desarrollo del glaucoma y en consecuencia a la progresiva pérdida de la visión.
Para tratar esta afección, los científicos del Laboratorio BioMEMS, diseñaron un microdispositivo activo que permite aumentar y reducir el caudal de drenaje del humor acuoso de forma inalámbrica, a través de radiofrecuencias emitidas por una fuente externa. Estos dispositivos presentan mejor biocompatibilidad debido a la reducción del tamaño y del daño ocasionado en el procedimiento quirúrgico.
"Este sería el primer implante biomédico argentino patentado y desarrollado con microtecnología diseñada y fabricada íntegramente en el país. Estamos muy entusiasmados por seguir el camino hasta llegar a la sociedad y dar nuestro aporte a la medicina nacional e internacional", sostuvo el Dr. Fabio Guarnieri, autor de la patente, profesor en la FI-UNER e investigador en el Centro de Investigación de Métodos Computacionales (CIMEC-CONICET).
El diseño de las microválvulas está basado en simulación con técnicas de elementos finitos y cálculo paralelo y su desarrollo fue realizado con técnicas de micro y nano fabricación siguiendo los protocolos y las normas internacionales.
La iniciativa contó con el trabajo colaborativo y multidisciplinario de bioingenieros, bioquímicos, veterinarios, oftalmólogos, electrónicos, ingenieros y físicos, especializados en disciplinas como la microelectrónica, la radiofrecuencia electromagnética, los nanomateriales y la biocompatibilidad, entre otras.
Las microválvulas fueron implantadas por primera vez en cinco conejos en el Instituto de Ciencias Veterinarias del Litoral (ICIVET-CONICET-UNL) por el Dr. Rodrigo Torres, oftalmólogo de la ciudad de Paraná y miembro del comité científico de la Asociación Entrerriana de Oftalmología (AEO).
Según la Sociedad Argentina de Oftalmología (SAO), se calcula que hay alrededor de 68 millones de personas con glaucoma en el mundo, siendo la segunda causa de ceguera después de las cataratas. En la actualidad los tratamientos disponibles se basan principalmente en el uso de gotas para disminuir la presión intraocular y proteger el nervio óptico con el objetivo de detener o mitigar la evolución de la enfermedad.
El proyecto, presentado en congresos nacionales e internacionales de investigación oftalmológica, prevé iniciar las etapas preclínica y clínica según los protocolos de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT). A su vez, se considera la creación de una empresa de base tecnológica para su producción, para lo cual sus responsables han solicitado financiamiento al Fondo Argentino Sectorial (FONARSEC) de la Agencia a través de la línea EMPRETECNO EBT.