sábado, 21 de enero de 2017

Desarrollan biosensor electroquímico para análisis clínicos

Investigadores argentinos y mexicanos desarrollaron un biosensor electroquímico que, entre otras aplicaciones, puede ser empleado en la industria de energéticos y en análisis clínicos. 


Los biosensores son herramientas analíticas de bajo costo, que permiten realizar medidas rápidas y simples de manipular.

Químicos de la Facultad de Ciencias Exactas Físico-Químicas y Naturales de la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC) en trabajo conjunto con especialistas de la Facultad de Ciencias Químicas (FCQ) de la Universidad Autónoma de Coahuila (Uadec) de México, desarrollaron un biosensor electroquímico que puede ser utilizado en la industria de energéticos y en análisis clínicos, entre otras aplicaciones.

El proyecto que permitió este desarrollo se llama: “Diseño de un biosensor electroquímico para triglicéridos basado en el uso de la enzima lipasa inmovilizada en un nano-composito”. Esta propuesta de articulación científica se desarrolló en el marco de un Programa de Cooperación internacional entre el Grupo de Electroanalítica (GEANA) que dirigen los doctores Héctor Fernández y María Alicia Zon en el Departamento de Química de la Facultad de Ciencias Exactas, Físico-Químicas y Naturales de la UNRC, y el Grupo de Biotecnología que dirige la doctora Anna Iliná, de la Facultad de Ciencias Químicas, Universidad Autónoma de Coahuila, Saltillo, México.

Alicia Zon indicó a Argentina Investiga que “el objetivo del proyecto fue diseñar un biosensor para la detección de triglicéridos, para aplicaciones relevantes en biotecnología y clínica médica”.

¿Qués es un biosensor?

“Un biosensor es un dispositivo que combina dos partes: un bioelemento y un transductor adecuado” explicó la investigadora. El concepto básico del funcionamiento de un biosensor puede ser graficado a partir de la figura que ilustra esta nota.

“El bioelemento es capaz de reconocer la presencia, la actividad o la concentración de un sustrato especifico en la solución. El reconocimiento puede ser un proceso obligatorio (biosensor basado en la afinidad, cuando el elemento de reconocimiento es, por ejemplo, un anticuerpo, un segmento de DNA o un receptor celular) o una reacción biocatalítica (biosensor basado en enzimas)” señaló la especialista y agregó que “de la interacción del bioelemento con un sustrato resulta un cambio medible en una propiedad de la solución, como por ejemplo la formación de un producto. El transductor tiene la misión de convertir el cambio en la propiedad de la solución en una señal eléctrica cuantificable. Es de interés notar que el bioelemento está integrado en o en las proximidades del transductor. Cuando en la etapa de transducción se utiliza una técnica electroquímica (potenciometría, amperometría o medida de la corriente eléctrica, impedancia electroquímica, etcétera) el biosensor se denomina biosensor electroquímico”.

La doctora Alicia Zon indicó que en general, los biosensores son herramientas analíticas de bajo costo, que permiten realizar medidas rápidas y simples de manipular. “Son altamente selectivos debido a la alta especificidad del elemento de biorreconocimiento. Además, ofrecen la posibilidad de análisis en tiempo real, debido a su pequeño tamaño, lo que es importante para la medición rápida de analitos de interés, tanto clínico como medioambiental”.

Así, durante el desarrollo del proyecto, los investigadores argentinos y mexicanos diseñaron un biosensor electroquímico para la determinación de triglicéridos en muestras de suero. La doctora Alicia Zon dijo que “los resultados fueron comparados con el ensayo colorimétrico clínico, encontrándose una buena correspondencia entre ambas metodologías de detección. El biosensor mostró también buenos parámetros analíticos, como concentración mínima a determinar (límite de detección) y reproducibilidad”.

“La siguiente etapa es la optimización del sensor, que implicaría métodos de preparación, tiempos de preparación, costos; todo esto acortarlo al máximo para hacerlo rentable y, en un futuro, teniendo una patente, vincularnos con alguna empresa que pueda interesarse en su producción”, finalizó la química de la Facultad de Ciencias Exactas, Físico-Químicas y Naturales de la UNRC.

Fuente: Argentina Investiga