Con una inversión superior a los US$ 1.200 millones, la empresa mendocina IMPSA avanza con la construcción de los cuatro nuevos generadores de vapor que tendrá la Central Nuclear Embalse, tras su proceso de extensión de vida.
El recambio de estos generadores le permitirán a la central producir electricidad con una potencia de 700MW. Se trata de cilindros metálicos de 60 toneladas de peso y de 14 metros de largo y 2,5 metros de diámetro, en cuyo interior se instalan 3.540 tubos en U de 16 milímetros cada uno, y que se conectan al reactor nuclear de la central.
En el proceso de fabricación de los generadores de vapor, trabajaron primero 100 personas en el armado de cada cilindro y ahora son 150 los que se encargan del entubado, cierre y puesta a punto de cada pieza.
Todo este proceso se realiza siguiendo altísimos estándares de calidad nacional e internacional. De hecho, IMPSA es la única empresa latinoamericana habilitada y con certificación “AsmeN” para la fabricación de estas piezas de gran porte para una central nuclear.
Según los plazos del contrato, los cuatro generadores de vapor deben estar terminados para diciembre de 2015. Para esa fecha se tiene previsto iniciar la etapa de traslado y montaje en la Central Nuclear Embalse, tarea que ha sido concesionada y está a cargo de otras empresas.
La Central Nuclear Embalse está en el proceso de extensión de su vida útil. Generaba 648 MW de potencia bruta, pero a partir de los nuevos generadores de vapor con mejor diseño, la potencia bruta subirá a 700 MW. Es decir, un 6% más.
Fuente: U238