Científicos lograron la primera preñez en la llama a partir de un embrión producido mediante fertilización in vitro. Los investigadores utilizaron gametas obtenidas de animales vivos y las transfirieron al útero de una hembra denominada “receptora”. El aumento de la eficiencia reproductiva de las especies de camélidos sudamericanos redundará en el mejoramiento de las condiciones de vida de los pobladores de la Puna Argentina.
Los camélidos se encuentran representados por seis especies: los denominados “Camélidos del Viejo Mundo”, que son el bactriano (camello de doble joroba) y el dromedario (camello de simple joroba); mientras que los “Camélidos Sudamericanos” (CSA) son los camélidos silvestres (guanaco y vicuña) y los camélidos domésticos (llama y alpaca). En los últimos años ha existido un interés creciente en la producción de CSA, no sólo en los países de América del sur, sino también en diferentes países alrededor del mundo. Debido a que estas especies presentan un período de gestación largo (335 a 360 días) y sólo paren una cría al año, científicos de la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA) aplican técnicas de reproducción asistida para optimizar el manejo reproductivo de aquellas hembras genéticamente superiores y, de esta manera, incrementar el progreso genético de las especies.
Este trabajo es el resultado de la optimización de varias investigaciones, tanto en la hembra como en el macho, a partir del perfeccionamiento de técnicas como la obtención de ovocitos (gameta femenina) y de semen, el cultivo embrionario in vitro a partir de la evaluación varios medios de cultivo, la transferencia embrionaria de embriones producidos in vivo, etc. Otro grupo de trabajo aplica la técnica de fertilización in vitro a partir de gametas obtenidas de animales de matadero, principalmente en países como Perú y Bolivia, que cuentan con instalaciones apropiadas.
El propósito del trabajo es continuar con la transferencia de embriones producidos in vitro y lograr el nacimiento de una cría de llama, objetivo que aún no ha sido alcanzado en CSA. La investigación pretende aumentar el conocimiento de la fisiología de la reproducción en los camélidos y aplicar biotecnologías reproductivas, para que luego puedan ser empleadas con fines productivos en animales que presentan un mérito genético superior al de las especies domésticas. Una vez perfeccionadas las técnicas podrán ser aplicadas a los camélidos silvestres.
Los camélidos domésticos y silvestres cumplieron un papel muy importante para la vida de los pobladores originarios de América del sur, quienes aprovecharon las abundantes poblaciones andinas y patagónicas. Luego de la conquista europea de nuestro continente, la población de CSA inició una prolongada etapa de decaimiento causada por la cacería indiscriminada de las especies silvestres y la sustitución de las especies domésticas por ganado bovino, ovino y caprino. Sin embargo, como los CSA evolucionaron junto al ecosistema andino y patagónico, están particularmente adaptados a zonas de escasa oferta forrajera y condiciones climáticas desfavorables. Además, presentan una serie de características que promueven su producción, como su gran adaptabilidad, al poder sobrevivir en alturas superiores a los 4.000 msnm; capacidad única para nutrirse y aprovechar pastos de baja calidad; no erosionan el suelo debido a que presentan almohadillas digitales y no arrancan el pasto de raíz.
Estos animales constituyen recursos ganaderos autóctonos por su producción de carne y fibra. La fibra es muy valorada internacionalmente por la industria textil y la carne es casi la única fuente de proteínas de origen animal disponible para los habitantes de nuestra Puna Argentina, por lo general con necesidades básicas insatisfechas y ubicándose entre los grupos con condiciones de vida más desfavorables. Por lo tanto, el aumento de la eficiencia productiva, y especialmente reproductiva de las tropas actuales, representa una alternativa para contribuir al mejoramiento de las condiciones de vida de los pobladores. Para cualquier programa que persiga este objetivo con éxito, resulta imprescindible un fuerte incremento en el conocimiento que hoy se tiene de las especies y, en particular, de su fisiología reproductiva.
En cuanto a las especies silvestres, como la vicuña, existen pocos estudios realizados en la reproducción y muchos menos en la aplicación de biotecnologías reproductivas. Al tratarse de una especie silvestre y haberse encontrado durante varios años en peligro de extinción, se tomaron medidas de control extremas y justificadas para el manejo de estos animales; valiosos no sólo por su finísima fibra, sino también por la importancia cultural que representan en nuestras comunidades de la Puna. Lamentablemente, este valor cultural no se encuentra representado a nivel nacional, muy por el contrario, es superado por el valor económico que posee la fibra, lo cual demuestra un desinterés por el bienestar y la conservación de la fauna autóctona. Afortunadamente, se logró rescatar a la vicuña del peligro de extinción debido a un arduo trabajo realizado por grupos de investigadores y conservacionistas y en la actualidad se encuadra en la categoría de especie protegida.
El grupo lleva más de 15 años trabajando en relación a la fisiología de los CSA. En ese período se realizaron numerosos aportes al conocimiento de la fisiología reproductiva, su control hormonal y la aplicación de biotecnologías en las especies. A esos aportes a nivel científico, publicados en tesis, revistas científicas y congresos de nivel nacional e internacional, se suma la presencia a lo largo de todo el país en la realización de tareas de investigación y transferencia a productores, lo que le confiere, además, un amplio conocimiento de campo y de la problemática actual.
Este trabajo que se publicó en la revista científica internacional, “Animal Reproduction Science” (First llama [Lama glama] pregnancy obtained after in vitro fertilization and in vitro culture of gametes from live animals), es el resultado del trabajo en equipo de todos los integrantes de la cátedra de Teriogenología, a cargo del doctor Marcelo Miragaya, de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Buenos Aires. Fue desarrollado con fondos otorgados por la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica. Este tipo de estudio conlleva una gran logística e involucra la participación de muchas personas, ya que requiere de un grupo para la obtención de los ovocitos de la hembra y otro grupo que trabaje en forma simultánea para la obtención de semen del macho.
Fuente: Argentina Investiga