Esta empresa incubada en la CONAE y especializada en resonancia magnética ha dedicado sus últimos años al negocio de la industria alimentaria. Sin embargo, prepara dos nuevos productos para YPF que pueden darle un giro exponencial a la firma, en la que hoy trabajan 25 talentos (doctores en física, química, ingenieros, etc.) de nivel mundial.
Con una inversión millonaria - realizada con aportes propios y una línea de créditos nacionales - la empresa cordobesa inauguró ayer su sede de 1.200 metros cuadrados en el kilómetro 24,4 de la ruta nacional 20.
La moderna construcción está vidriada en su mayoría para aprovechar el entorno natural (está junto al country Causana), lo recomendado para tareas de investigación, desarrollo y la fabricación de alto valor agregado.
“Actualmente trabajamos en la producción de equipos de resonancia magnética para medir la calidad y cantidad de aceite en semillas (soja, maní, girasol, oliva), allí tenemos de clientes a grandes multinacionales (Nidera, Syngenta) y semilleras locales”, cuenta Dante Pusiol, CEO de la empresa.
“Pero este año apostamos a que dos productos puedan revolucionar (sic) el mercado petrolero: se trata de un caudalímetro que en los próximos días YPF probará en Neuquén, será el primero en su tipo en el mundo en usar resonancia magnética y si la validación es correcta tenemos un campo de acción muy grande”, se entusiasma.
El otro, es un analizador de cortes que la tecnológica también intentará venderle a la petrolera estatal. Este equipo es más económico que el anterior (unos US$ 100.000). “Poder incursionar en la industria petrolera haría que Spinlock creciera exponencialmente”, acota el gerente de la empresa que exporta la mitad de su producción a 16 países.
Fuente: InfoNegocios