miércoles, 29 de junio de 2016

Diseñan un novedoso sensor piezoeléctrico

Científicos de la UBA y del CONICET desarrollaron un prototipo altamente sensible que, mediante un ingenioso artilugio, logra la misma velocidad de respuesta de dispositivos con menor área. 


Podría mejorar la calidad de las imágenes en ecografías y tomografías, entre otras aplicaciones.

En los sensores piezoeléctricos, que transforman el ultrasonido y otras ondas mecánicas en señales eléctricas, el tamaño sí importa: cuando tienen mucha superficie, ganan en sensibilidad pero pierden velocidad de respuesta y se resiente la información transmitida. Ahora, científicos de la UBA y el CONICET diseñaron un prototipo con gran área de lectura y sin los inconvenientes clásicos que esa propiedad acarrea. El dispositivo podría aplicarse, por ejemplo, para mejorar la calidad de las imágenes en tomografías y ecografías.

“Por su relevancia, el desarrollo está en proceso de ser patentado”, indicó a la Agencia CyTA-Leloir, el doctor Martín González, investigador del CONICET y de la Facultad de Ingeniería de la UBA en el Grupo de Láser, Óptica de Materiales y Aplicaciones Electromagnéticas (GLOMAE).

Los sensores piezoeléctricos son imprescindibles para el funcionamiento no sólo de instrumentos médicos, sino también en equipos tales como micrófonos, sensores de presión en máquinas industriales o aparatos para medir contaminantes en agua.

En el nuevo prototipo, los investigadores dividieron los electrodos del sensor en secciones más pequeñas que se conectan eléctricamente en serie. “De esta forma, sin afectar su respuesta a las ondas mecánicas, el sensor se comporta, desde el punto de vista eléctrico, como uno de área mucho menor”, dijo González. “Pero, en realidad, están cubriendo un gran área con alta sensibilidad”.

Si bien los investigadores están desarrollando sensores ultrasónicos de alto desempeño aplicables en biología y medicina, su método se puede aplicar a distintos materiales piezoeléctricos, tanto cerámicos (que son mecánicamente rígidos) como poliméricos (flexibles). “Permite una gran libertad en la elección de la configuración geométrica del sensor, lo que facilita su adaptación  a la forma de un objeto”, explicó González.

El desarrollo de los científicos argentinos se describe en la publicación especializada “The Review of Scientific Instruments”.

Fuente: Agencia CyTA