El desarrollo realizado por el especialista Germán Villar fue pensado para la implantación de todo tipo de granos, con distribución tipo Air Drill y un singular sistema de chasis tipo puente que unifica en un solo equipo la unidad tractora con los dispositivos sembradores, lo que le permite optimizar la aplicación de la potencia y la distribución de los pesos, entre otras ventajas.
Opera con un chasis principal tipo puente, en donde se monta la cabina de conducción, el motor (300 HP) y la tolva para granos y fertilizantes (8.000 litros). De él se desprende un chasis secundario portaherramientas.
El diseño general propone un nuevo concepto de sembradora, que homologa todos los componentes de un tractor y una sembradora convencional. Partiendo de una arquitectura en forma de puente, con ejes alejados, permite situar en el centro las herramientas de trabajo y, por encima del chasis, la tolva y la cabina de conducción.
Ventajas
El diseño general propone un nuevo concepto de sembradora, que homologa todos los componentes de un tractor y una sembradora convencional. Partiendo de una arquitectura en forma de puente, con ejes alejados, permite situar en el centro las herramientas de trabajo y, por encima del chasis, la tolva y la cabina de conducción.
Ventajas
La posibilidad de integrar en un solo equipo sembrador las actividades de tracción e implantación de semillas presenta importantes ventajas, especialmente en lo que respecta a la optimización en la aplicación de la potencia y la distribución de los pesos.
Hasta el momento, existen variados sistemas de siembra en el mercado, pero todos ellos requieren de dos componentes: Una sembradora estacionaria y una unidad tractora independiente con características ajenas a la función de siembra.
Al ser dos componentes diferentes para una sola tarea, cada cual posee peso propio. Debido a que cada tren de siembra requiere de gran cantidad de fuerza para poder ser embutido en la tierra, las sembradoras convencionales necesitan de estructuras robustas acorde a los trenes de siembra que posee. De esto se deduce que la potencia en la unidad tractora se aumenta en proporción a la necesidad de fuerza de arrastre del equipo.
Con este equipo homologado se dispone de toda la fuerza aplicando sobre el ornamental de la barra porta-herramienta, permitiendo un clavado efectivo sobre cualquier tipo de terreno a sembrar.
Fuente: Maquinac