jueves, 19 de mayo de 2016

Avances en la obra civil del reactor nuclear RA-10

Desde que comenzaron los trabajos, a fines del mes de marzo, se continúa con la remoción de tierra y el trazado de caminos que conducirán hacia el emplazamiento del reactor multipropósito, en el Centro Atómico Ezeiza.


La etapa de construcción iniciada incluye tanto la obra civil (en esta primera instancia, remoción de tierra, elevación del terreno e impermeabilización de caminos) así como el suministro y el montaje, que se realiza a través de la CNEA e INVAP. Otros suministros relevantes que ya están en curso son la provisión de uranio para los elementos combustibles, el agua pesada (ENSI), la instrumentación nucleónica (CNEA) y el suministro eléctrico (EDESUR).

Además del inicio de la etapa de construcción, José Luis Freijo, Subgerente de Construcción, Provisión y Montaje (CPM) del Proyecto RA-10, destaca otros pasos importantes ya alcanzados como la finalización de la etapa de diseño; el otorgamiento de la licencia de construcción por parte de la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN) y el certificado de la aptitud ambiental.

Actualmente, participan del proyecto 150 profesionales de 12 sectores de la CNEA, con equipos de trabajo consolidados en el CAE y el CAB. Por otro lado, ya comenzó el plan de capacitación de los primeros operadores del reactor. “La formación de los operadores demanda alrededor de cuatro años. Parte de la capacitación se realiza mediante la Especialización en Reactores Nucleares y Ciclo de Combustible del Instituto Dan Beninson. En total, van a ser unos 60 operadores divididos en cinco turnos, más algunos puestos fijos como el personal dedicado al mantenimiento”, explica Freijo.


Con respecto a los plazos, la obra civil junto con el suministro y el montaje del RA-10 se tiene previsto que finalice en 2019. Ese mismo año se realizarán las pruebas operacionales y la tramitación de la licencia de puesta en marcha, la cual se extenderá desde fines de 2019 y parte de 2020. Asimismo, la ARN debe emitir la licencia de operación.

El RA-10 será el reactor multipropósito más moderno de su tipo en el mundo. A través de este proyecto, la Argentina busca ampliar las capacidades actuales de producción de radioisótopos (que actualmente cubre con el reactor RA-3, ubicado también en el Centro Atómico Ezeiza).

Por su gran versatilidad, este reactor permitirá además encarar proyectos en el campo de los combustibles y realizar ensayos de materiales nucleares, mediante instalaciones de irradiación adecuadas que permitan incrementar la experiencia que el país tiene en el área y expandiendo la oferta de servicios al mercado mundial.

Comparativamente con el RA-3, Freijo comenta que “todos estos reactores tienen similitudes porque son de la misma especie, pero con muchos años de evolución. El RA-10 cuenta con mejoras incorporadas a partir de la construcción de otros reactores que se han exportado como a Perú y a Australia. Entonces, se fue actualizando la tecnología, agregándole mejoras y, si bien es parecido, es un reactor mucho más complejo, con mayor versatilidad y mayor potencia”.

Fuente: CNEA